OURENSE, 31 de octubre de 2019.- El Centro Asociado a la UNED en Ourense-Aula Universitaria de A Rúa inauguró esta semana el curso académico 2019-2020 en el Centro Cultural Marcos Valcárcel de la Diputación Provincial, y para ello contó con la presencia de la vicerrectora de Investigación y Transferencia, doctora María Rosa Martín Aranda. Junto a ella estaban el vicepresidente de la Diputación de Ourense, Rosendo Luis Fernández Fernández, en representación del presidente de la Diputación y del patronato de la UNED, José Manuel Baltar; por parte de la vicepresidencia de la Junta rectora, que corresponde al Concello de Ourense, asistió la concejala de Educación, María Teresa Rodríguez Garrido, supliendo la ausencia del alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, por el fallecimiento de su madre. También asistió la delegada de la Xunta en Ourense, Marisol Díaz Mouteira; el director del Centro Asociado, doctor Jesús Manuel García Díaz y la secretaria del centro, María Concepción Álvarez Gómez. Entre el público se encontraban los alcaldes de A Rúa, Álvaro José Fernández López y el de Pereiro, Luis Menor; la vicerrectora del Campus de Ourense de la Uvigo, doctora Esther de Blas; el director de la Escuela Superior de Ingeniería Informática de la Uvigo, doctgor Francisco Javier Rodríguez Martínez; la decana de la Facultad de Historia de dicha universidad, doctora Susana Reboreda y el vicedecano de la Facultad de Ciencias Empresariales y Turismo, doctor Francisco Tugores Martorell. En esta sesión quedó patente la renovación del apoyo económico de las instituciones integrantes del Consorcio para con la presencia ya veterana de la UNED en Ourense.
Primar la investigación
La doctora Martín Aranda resaltó que para afrontar una buena investigación, “la UNED entra en el siglo XXI adaptando las nuevas estrategias, en las que ha apostado por una cooperación fuerte con los centros asociados para progresar en Investigación, Transferencia del Conocimiento a la Sociedad y Divulgación Científica”. Añadió que en los últimos 30 años la UNED “ha madurado y se encuentra en un momento de expansión, totalmente alineada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y con un compromiso social inconfundible, dispuesta a extender su investigación de forma internacional”.
Destacó Martín Aranda que la UNED, además de ser la única universidad de ámbito nacional, es la “más grande de España y una de las diez mayores del mundo. Disponemos de una estructura compuesta por unos 1.312 profesores en la sede central, más de 6.000 profesores tutores y unas 1.129 personas de administración y servicios. Todo ello con un diseño territorial compuesto por 61 centros asociados. Para este curso académico se prevén más de 140.000 alumnos de grado, máster y doctorado”.
En su discurso, la vicerrectora de Investigación y Transferencia del Conocimiento afirmó que “la UNED es la universidad de referencia y preferencia para la mayoría de nuestros amigos o familiares que están trabajando fuera de nuestro país por un futuro mejor, a través de 16 centros en el extranjero que dan cobertura a más de 2.000 estudiantes”. Además, la UNED apuesta por la formación de calidad a lo largo de toda la vida, con sus programas para el acceso a la universidad para mayores de 25 y 45 años.
“También somos la universidad que hace llegar los estudios universitarios a aquellas personas que se ven privadas de libertad, dando opción a unos 1500 hombres y mujeres internos en centros penitenciarios al acceso a la universidad”, destacó la vicerrectora. “Esta Universidad acoge a cerca del 50% de estudiantes universitarios de todo el territorio nacional con algún tipo de discapacidad, esforzándose día a día en eliminar cualquier barrera que se interponga entre ellos y la educación superior”, indicó en el acto de apertura del curso en Ourense. “La UNED imparte 28 grados y 11 grados combinados, 75 Másteres oficiales, 19 programas de doctorado, 19 cursos del centro universitario de idiomas a distancia, y 465 títulos propios, sin contar cursos de verano o de extensión universitaria”, aseguró Rosa Martín.
Esta vicerrectora de la UNED afirmó, además, que las nuevas posibilidades tecnológicas han tenido un gran impacto en otras tareas tradicionales de la UNED, como la investigación”. Así, dijo, se ha visto reforzada “la presencia nacional e internacional de nuestros grupos de investigación” pues sus ámbitos de actuación y sus posibilidades de trabajo se han ensanchado. “La ciencia, la tecnología y la innovación son elementos cruciales en la sociedad de nuestro tiempo. El desarrollo sostenible y el bienestar social deben asentarse en la generación y difusión del conocimiento y la innovación”, afirmó Martín Aranda en su discurso, para hacer hincapié en que la UNED “tiene el compromiso actual y futuro de potenciar las tareas de cooperación y proporcionar una dimensión de internacionalización a nuestra labor investigadora”.
A continuación se refirió al Centro Asociado de Ourense, destacando que “su director, Jesús Manuel García Díaz, apoyado por el Ayuntamiento y su Consorcio, ha apostado por una fuerte dedicación a la Investigación y a la Comunicación, totalmente acorde con los objetivos marcados en nuestro Plan Estratégico. Trabajamos juntos por un futuro sostenible con ilusión, profesionalidad, esfuerzo, compromiso, innovación en investigación y responsabilidad”, augurando que “pronto empezaremos a ver los frutos, pues Ourense, en poco tiempo, ha aumentado el empleo tecnológico, ofreciendo estudios variados y empleo en el sector. La UNED es y será una Universidad de referencia para la sociedad gallega”. Agradeció la vicerrectora el apoyo de las instituciones que contribuyen a que la actividad del Centro Asociado a la UNED en Ourense sea posible, actividad para la que tuvo elogios.
El representante de la presidencia del Consorcio, Rosendo Luis Fernández, afirmó, un año más, que la Diputación de Ourense “continuará contribuindo dun xeito firme e decidido a facilitar e promover o acceso á educación universitaria a todos os vecinos da provincia” a través del Centro Asociado a la UNED. La representante del Concello, que ostenta la vicepresidencia del Consorcio, María Teresa Rodríguez Garrido, alabó a esta Universidad porque gracias a ella “todo o mundo pode, independentemente de onde vive e das súas circunstancias laborais, cursar estudos superiores ou cursos especializados de primeiro nivel co que esto significa, máis que nunca, na Europa do coñecemento e da aprendizaxe”. De hecho Garrido señaló que el Concello se va a beneficiar de la colaboración científica de la UNED con el convenio de colaboración para el Centro de Inteligencia Artificial.
La delegada de la Xunta en Ourense, Marisol Díaz Mouteira, destacó que la puesta “decidida do Goberno galego pola universidade é una aposta segura polo futuro dos galegos e galegas”. Añadió que “a aposta das institucións ourensás polo funcionamento do centro da UNED é, igualmente, un acerto e un compromiso”.
El director del Centro Asociado, doctor Jesús Manuel García, dio la bienvenida a los estudiantes de la UNED, que “vienen a una gran Universidad, prestigiosa, veterana, adaptada a cada uno de los estudiantes”. Señaló que pertenecer a la UNED “es un lujo al alcance de la población”. García indicó que “dirigir el Centro Asociado a la UNED en Ourense, al frente del equipo que lo integra, solo me permite decir que es tarea tan compleja como apasionante, tan rigurosa como feliz. Aquí estaremos, trabajando con firmeza para cumplir en los próximos meses y años el Plan estratégico que nos ha marcado en Rectorado. Y apostando no solo por la docencia sino por la investigación, que es el alma de toda universidad que se precie. Trabajando para que otros, verdaderos valientes, con su esfuerzo intelectual, comprueben cada día en sus carnes el lema de nuestra Universidad: la sabiduría mueve más que todas las cosas que se mueven”.
Memoria del curso anterior
La secretaria del centro Asociado dio lectura a la Memoria del Curso 2018-2019 destacando que el principal reto al que nos enfrentamos es el de conseguir llevar a buen puerto la impartición de todas las titulaciones ofertadas en nuestro centro asociado, lo que supone tutorizar casi 1.500 materias, de las que cerca de un tercio son presenciales o emitidas desde Ourense y el millar restante se reciben por vídeo o webconferencia desde los otros trece centros asociados con los que formamos el Campus Noroeste.
Como principales aspectos del curso que rematamos, Concepción Álvarez destacó “la implantación del tercer curso del Grado en Criminología, el nuevo plan de comunicación diseñado por la Dirección y la cuarta edición del programa de la UNED Senior, una apuesta por la formación continua de nuestros mayores para la cual contamos con la colaboración de la Excma. Diputación Provincial de Ourense, que no sólo pone a nuestra disposición el Centro Cultural Marcos Valcárcel sino que subvenciona con el 50% del coste de la matrícula al alumnado domiciliado en la provincia de Ourense”.
Toda esta labor fue posible gracias a unos recursos humanos que suponen 60 profesores tutores en el Centro Universitario de Ourense, otros 11 en la Extensión de la Rúa y 9 trabajadores de Administración y Servicios que atienden a cerca de 1.050 matriculados sólo en Enseñanzas Regladas, a los que habría que sumar los matriculados en las actividades formativas y de extensión universitaria: otros casi 600 alumnos y alumnas en total que constituyen la auténtica razón de ser de nuestro Centro Asociado.
Expuso la secretaria que el alumnado procede en su mayor parte, casi un 83%, de la provincia de Ourense, ”certificando lo que, creemos, constituye una importante labor social en la medida en que proporcionamos formación a un número muy significativo de ourensanos que de otro modo tendrían difícil acceder a la enseñanza superior. No obstante, también tenemos porcentajes significativos de alumnos procedentes de las otras tres provincias gallegas (casi un 16%) que eligen nuestro centro y a nuestros docentes para completar su formación”.
Por comarcas de origen del alumnado domiciliado en la provincia de Ourense, tenemos representación de todas ellas, destacando en primer término los procedentes de la comarca ourensana, que suponen cerca de un 74% del total, seguidos de los de las comarcas de O Carballiño, Verín, y la Limia, en los tres casos con porcentajes que rondan o superan el 5%.
Por grandes áreas de conocimiento, “el alumnado que opta por Ciencias Sociales y Jurídicas representa el 41% del total, seguido por el de Ciencias de la Salud (18%), Artes y Humanidades (15%), el Curso de Acceso (6%), el alumnado de Ciencias Experimentales e Ingeniería (en conjunto un 7%) y los alumnos y alumnas de CUID y Posgrados (15%)”, manifestó la secretaria del Centro Asociado a la UNED en Ourense.
Si comparamos las grandes líneas evolutivas de matrícula en el último sexenio por esas grandes áreas de conocimiento, debemos destacar, en primer término, un ligero descenso en el número de alumnos matriculados en el pasado curso académico que se refleja en casi todas esas grandes áreas de conocimiento, excepto en Ciencias y CUID y Posgrados. Un descenso que constituye el lógico reflejo de la disminución de las cohortes demográficas en edad de cursar estudios universitarios que padece nuestra provincia y que es previsible que continúe en los próximos años.
Por edades, la mayor concentración de alumnos se produce en el tramo de 27 a 45 años, “aunque tenemos cumplida representación desde los 19 hasta los 79 años, lo que viene a certificar el papel complementario de la UNED respeto de la Universidad presencial en la medida en que, como ya hemos señalado, buena parte de ese alumnado no tendría posibilidad de cursar estudios universitarios de no existir nuestra oferta educativa”, señaló Álvarez.
Ha sido especial seña de identidad de este Centro Asociado la apuesta por la formación continua de calidad más allá de las enseñanzas regladas. Así, el pasado curso académico se prestó especial atención a las actividades de extensión universitaria y culturales, tratando con ello de llevar la universidad a las villas y principales centros comarcales de nuestra provincia al margen de la propia capital. “Así, hemos organizado diversas actividades en Valdeorras, O Ribeiro, la comarca del Támega, Celanova y la Tierra de Orcellón, con una oferta de cursos centrados, principalmente, en los principales ejes de desarrollo potencial de Ourense (turismo, viticultura, patrimonio cultural y religioso, etc.)”.
En total, en el curso académico que finalizamos, llevamos a cabo 27 actividades de extensión universitaria y culturales sin contar la Senior, con 600 alumnos matriculados, lo que supone para nosotros atender 123 días al año de formación no reglada y un total de 450 horas de formación. A esto tendríamos que añadir 10 prácticas de alumnos y alumnas en entidades públicas y privadas solo en los másteres de Formación del Profesorado, Prevención de Riesgos Laborales y Psicología Sanitaria, además de otras 23 prácticas en los grados de Educación Social, Psicología y Trabajo Social y una en Turismo.
La secretaria agradeció agradeció a las entidades patrocinadoras: la Diputación Provincial de Ourense, el Ayuntamiento de Ourense, la Universidad Nacional de Educación a Distancia, la Xunta de Galicia y el ayuntamiento de A Rúa “el esfuerzo realizado para el sostenimiento de nuestro Centro Asociado. El compromiso diario de todas estas instituciones con el Centro Asociado de Ourense es la mejor garantía para que podamos afrontar con solvencia lo que serán los grandes retos de la educación del futuro”.
Reconocimiento a Jesús de Juana
En este solemne acto se incluyó un reconocimiento al exprofesor tutor y exdirector del Centro Asociado de la UNED en Ourense, doctor Jesús de Juana López, catedrático y profesor de Historia Contemporánea en la Uvigo. La secretaria, Concepción Álvarez Gómez dio lectura al acta de la sesión del Consejo de Dirección del pasado 21 de junio de 2019, en el que a propuesta de la actual dirección se aprobó por unanimidad este reconocimiento. La vicerrectora de Investigación y Transferencia del Conocimiento, María Rosa Martín Aranda hizo una breve semblanza de la trayectoria académica y profesional del homenajeado destacando que merecía esta distinción de la UNED. Jesús de Juana, emocionado, subió al estrado y Martín Aranda le impuso en la solapa la insignia dorada con la rosa de los vientos, que forma parte del escudo de la Universidad Nacional de Educación a Distancia, mientras todos los miembros de la mesa se pusieron en pie.
De Juana, con emoción pero no sin humor, agradeció la distinción, hizo un breve repaso de la historia del Centro Asociado y, entre otros, citó a San Agustín, del que dijo “aúna tres pilares de la cultura europea: el pensamiento griego, el derecho romano y la religión judeo-cristiana”. Con el de Hipona siguió para, tomando como base su frase que reza: La gratitud es la memoria del corazón, dar las gracias a todos. El público que llenaba el salón de actos del Centro Cultural Marcos Valcárcel reaccionó con un prolongado aplauso para el veterano profesor, ahora jubilado.
Representante de Estudiantes egresados
En representación de los estudiantes recién graduados intervino María Teresa Perolio Hurtado, que estudió Psicología. “Yo empecé en la UNED con 48 años, unos me decían que estaba loca, otros que era muy valiente, otros que qué necesidad tenía, y que con cargas familiares y laborales no lo conseguiría… pues aquí me tienen, ante todos ustedes, graduada, y esto ha sido posible al esfuerzo y la motivación personal y a la UNED, que me ha dado las herramientas necesarias para hacerlo posible”.
Señaló esta recién egresada que hay quien piensa que “por ser la universidad a distancia, te lo van a poner más fácil, o que son menos exigentes, pero la verdad (y mis compañeros estarán de acuerdo conmigo) que nada más lejos de la realidad. La UNED es una lanzadera fantástica para todos los que por cualquier motivo no puedan o no se puedan permitir asistir a la universidad presencial, pero no te regalan nada, te hacen trabajar mucho y muy duro, pero todo este esfuerzo merece la pena”.
Según Perolio, “otra de las etiquetas que tiene la UNED, es la soledad, y así es…, eres tú, con un ordenador y un tocho de 800 páginas, pero no es menos cierto que detrás de ti, hay todo un engranaje de profesionales dispuestos a ayudarte a superar tus retos”. Animó a cuantos empiezan este año su andadura en la UNED para que “no desfallezcan, que la edad no es una excusa, que querer es poder, que afortunadamente la UNED no distingue entre hombres y mujeres, que las mujeres también podemos hacer ciencia, que si somos capaces de traer hijos al mundo, no debería haber nada que nos impida alcanzar nuestras metas, y tenemos la suerte de contar con una universidad que nos brinda esta oportunidad, no la desaprovechéis, de verdad, merece la pena el esfuerzo”.
Lección inaugural
La lección inaugural la impartió el profesor tutor de historia Contemporánea, doctor Julio Prada Rodríguez. Bajo el título ¡Cómo hemos cambiado!...La caída del muro de Berlín tres décadas después, el ponente señaló que mediado el año 1989, “ni siquiera los más optimistas pensaban que el símbolo por excelencia del mundo bipolar que emergió tras la Segunda Mundial podía tener los días contados y la unificación de los dos estados alemanes separados por la guerra fría no tardaría en ser una realidad”. La caída del muro simbolizó la crisis del socialismo real en el Viejo Continente, señala Prada, en contraposición con los avances logrados por las Comunidades Europeas, “que el 7 de febrero de 1992, daban un paso sustancial en su proceso de integración con la firma por los doce socios del Tratado de Maastricht. Una crisis que supuso, en primer lugar, la ruptura de los equilibrios en Europa en favor de una Alemania engrandecida. Y, en segundo lugar, un cambio esencial en las relaciones internacionales de posguerra que dio paso a lo que George H. W. Bush denominó el nuevo orden mundial, en referencia a la nueva etapa que se abriría una vez enterrada la guerra fría”.
El profesor recordó que lo ocurrido a partir de 1989 no vino precedido de un enfrentamiento bélico sino “del colapso económico y político de las antiguas democracias populares y del llamamiento por parte de George H. W. Bush y de Mikhail Gorbachov a la superación del orden bipolar surgido cuatro décadas atrás. En consecuencia, no solo no habían dejado de existir alternativas viables al capitalismo y al modelo de consumo occidental, sino que desde el punto de vista político se estaba asistiendo al preludio de una nueva era unipolar que vendría caracterizada por la extensión de las libertades y la hegemonía incuestionable de los Estados Unidos en un nuevo marco de seguridad global”.
Sin embargo, advierte Prada, la consolidación de los Estados Unidos como única superpotencia y la desaparición del «equilibrio del terror» no se tradujo en la definitiva erradicación de los conflictos de ámbito regional y local ni en un incremento substantivo de los niveles de seguridad. “Al mismo tiempo irrumpían con fuerza nuevas potencias de tipo medio con aspiraciones de ejercer una influencia creciente dentro de sus respectivas áreas de influencia, como Indonesia, Brasil, India o la propia Rusia, mientras China trababa incrementar su presencia política y económica a escala mundial”. A la invasión iraquí de Kuwait de agosto de 1990 seguirían, comentó Julio Prada, “las guerras de secesión de la antigua Yugoslavia y un sinnúmero de pequeños conflictos más o menos localizados que dieron origen a una sensación de crisis y caos que fue calificada en su momento como el desorden de la pos-Guerra Fría, en el que, a juicio de Samuel Phillips Huntington, los Estados ya no se agrupaban en torno a los ‘tres bloques’ de la guerra fría sino en torno a las siete u ocho civilizaciones más grandes. Los atentados del 11 de septiembre de 2001 provocarían un cambio radical en la naturaleza de las relaciones internacionales y la política exterior estadounidense que vinieron a demostrar cuánto había de ficticio en las promesas de una era de paz formuladas solo diez años antes”.
El triunfo del capitalismo a nivel global no sólo no significó el ocaso de las crisis económicas, “sino que se vio acompañado del cuestionamiento del Estado del bienestar en países occidentales en los que se creían tener aseguradas las conquistas sociales básicas. La crisis hipotecaria del verano de 2008 y el posterior colapso del sistema financiero de los Estados Unidos desembocaron en la primera gran crisis económica global del siglo XXI”.
Julio Prada expuso que la persistencia de las desigualdades sociales y las bolsas de pobreza estructural en un buen número de países africanos, asiáticos y americanos, a pesar de los avances, “siguen provocando masivos desplazamientos de población de los que el drama de la inmigración incontrolada en toda la cuenca del mediterráneo no es sino la faceta más visible a la que nos enfrentamos desde nuestros cómodos hogares”. Por si todo ello fuese poco, “también hemos tenido que aprender a convivir con nuevas amenazas, a menudo latentes e inconcretas”, añadió el ponente.
Orden bipolar
El orden bipolar de la Guerra Fría se derrumbó debido a movimientos sociales y políticos “que se incubaron en el interior de algunos de los países que lo protagonizaron, mientras que el que pretendió sustituirlo en los años noventa se trastocó en la década siguiente a raíz de acontecimientos más puntuales pero con repercusiones geopolíticas globales como los ya mencionados ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, el surgimiento de otras potencias en Asia y la crisis económica mundial originada en los Estados Unidos”. Todo ello demuestra, en palabras del autor de la lección magistral, “que la naturaleza de los factores que conducen al desmantelamiento de un orden mundial determinado ha cambiado en las últimas décadas, de modo que ya no son los grandes conflictos bélicos los únicos factores capaces de producir resultados de semejante dimensión”. “Hoy podemos afirmar, _prosigue Prada Rodríguez_ que el final de un determinado orden geopolítico se produce cuando las principales instituciones constituyentes que sustentan el sistema declinan hasta el punto de hacerse irreconocibles y a menudo disfuncionales, sean cualesquiera las causas que provocan ese declive”.
Nuestro mundo de hoy ya no es unipolar como en la era post-soviética ni multipolar, “sino no-polar en tanto en cuanto está dominado por docenas de actores que poseen y ejercen varios tipos de poder”. Añadió el ponente que el fin del monopolio de los gobiernos sobre la política no es el único factor que hace que el mundo sea más desordenado, “pues, de hecho, las mismas alianzas sobre las que se habían sustentado las relaciones internacionales tras la Segunda Guerra Mundial se están erosionando con rapidez de modo paralelo a cómo lo hace la confianza en la fiabilidad de los Estados Unidos”.
La política como la veíamos conociendo ha terminado, “y el colapso de la política nacional y regional está llevando tanto a las economías desarrolladas como a las emergentes a centrarse cada vez más en los asuntos internos, abdicando de sus roles de liderazgo internacional en el proceso, mientras el rápido crecimiento de la desconfianza entre los centros de poder competidores pone en evidencia la necesidad de crear nuevas reglas e instituciones que sustituyan a las creadas tras la Segunda Guerra Mundial”, aseguró Prada.
Y en esta modernidad líquida en que nos hallamos, utilizando la expresión célebre de Zygmunt Bauman, nos vemos obligados a buscar sin cesar la identidad “porque en la modernidad líquida, el único valor heterorreferenciado es la necesidad de hacerse con una identidad flexible y versátil que haga frente a las distintas mutaciones que hemos de enfrentar a lo largo de nuestra vida”.
Para terminar su intervención , el profesor Julio Prada destacó que la Historia nos enseña que, “más pronto o más tarde, el vacío actual en la gobernanza mundial dará paso a nuevo orden. La cuestión clave sigue siendo si nosotros, los ciudadanos de todo el mundo, permaneceremos pasivos a lo largo de este proceso, o seremos capaces de asumir un papel proactivo en la determinación del porvenir”.
Diplomas y becas a los recién titulados
Como cada año, en este acto se entrega diploma y beca aun grupo de alumnos que han terminado sus estudios de grado o de máster. Así, en Derecho hubo diploma y beca para Carlos Arjiz Tresguerras, Nuria Jares Álvarez, Marcos Mondelo Baltar; Juan Carlos Nogueiras Iglesias y María Consuelo Prol Fernández. En Psicología recibieron diploma y beca Andrés Díaz Rodríguez, Begoña Penela Mato y María Teresa Perolio Hurtado. Los alumnos de Trabajo Social que también recibieron diploma y beca son Mary Pili Pérez Guerra, María Nieves Pérez Román y Áurea Rivada Balboa. Por último, recibió lo mismo Luis Rodríguez Carmona, alumno del Máster Universitario en Problemas Sociales.
Capela Madrigalista
La vicerrectora de Investigación y Transferencia del Conocimiento pronunció la fórmula de inauguración del curso académico en el Centro Asociado de Ourense, en nombre del rector. A continuación, tuvo lugar una actuación de la Capela Madrigalista que interpretó un pequeño repertorio de canciones del mundo como las africanas Sana Sanananina y Siyahamba; la gallega Compañeira; Mi pequeño amor y Nobody knows the trouble I see.
Esta actuación terminó con todos los asistentes puestos en pie para escuchar el Gaudeamus igitur, que puso el broche de oro al solemne acto inaugural. Así terminó esta jornada festiva en el Centro Asociado a la UNED en Ourense, estando presente una buena representación de profesores tutores.
Fotos: Alberte Paz y UNED Ourense.